Te pones frente la pantalla del ordenador. hablas por hablar en el messenger. Las horas pasan. Deseas que empiece algún partido bueno. que lo puedas ver por el portal rojadirecta.com. Que no se cuelgue.
A veces logras reunir algo de fuerza para salir a dar una vuelta. Curiosamente, casi lo prefieres hacer solo. Sabes que si tomas el aire te sentirás mejor. Al día siguiente no te espera nada bueno. Llevas algunos días sin novedades. Semanas, incluso.
Los fines de semana los gastas en las discotecas. justo como ayer. Lo peor de todo es que pasas de las autóctonas. te fijas en el único grupo de extranjeras de la discoteca. among them hay una rubia alta e impresionante. es la enésima vez que te pasa. porqué te parecen tan atrayentes esos ojos? esa expresión? Porqué crees estar seguro de que con ella vas a encontrar cosas que nadie de tu país te va a dar? Porqué estas tan condenadamente seguro? Crees que en ella subyace una paz, un orgullo, subyace un desinterés, una personalidad definida, una laguna comunicativa que hace las delicias de tu imaginación.
Tu mente se convierte en un almacén de pirotécnia;
la música, el calor, la gente chillando, bailando, agitando sus cabezas.
Al fondo aquellos ojos azules como el origen de una llama
Prendiendo de repente alguna caja del almacén.
Empiezan a saltar cohetes, que son tus ansias, sueños relámpago
...se enciende todo el material; arde toda la nave industrial.
Tu imaginación se desparrama por todo el lugar...
Das un trago a la cerveza, te acercas. Con ella (con la chica, no la cerveza) derrotas todos tus temores a la vez que el corazón te late fuerte y rápido. Curiosa e inesperada combinación de sentimiento y sensación. Qué fluye de esa mirada? Quiere hablar contigo, está claro. Quiere saber algo más de ti. Pero se aleja. Se aleja cuando te acercas.
Al final te dice que tiene novio. Sin darte cuenta ya hace un rato que os habíais cogido de la mano. Te desprendes de ella, le dices que lo entiendes, y que también sabes que ella te entiende cuando no quieres decir nada más. Te separas de ella y su mano y la tuya se desúnen rozándose hasta el límite de lo correctamente permitido. Parecían haber siempre estado juntas. Vuestras manos.
Vuelves a bailar con los amigos. Vuelves a colocarte en el camino marcado. Vuelves a los raíles de lo de siempre. Vuelves a encarar este domingo de hoy. Escuchas música, te cagas en todo y no destacas ningún apoyo para un destino más triste por fuera que por dentro pero menos muerto por dentro que por fuera.
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