Saturday, November 25, 2006

Sabado de perro

De perro y de nacimiento novedoso.

Hace tres días lo tenía todo: Una chica a la que querer, una chica con la que soñar, una chica con la que hablar y ver la TV, un extraño amigo, un trabajo tranquilo, una intimidad perfecta...

Solo tenía que preocuparme por mis sueños. ¿Lo has sentido alguna vez? ¿Has notado cómo tu única preocupación es hacer aquél viaje por amor? ¿Cómo tú única inquietud trivial es seguir anudando las anécdotas que la protagonista de tu novela sufrirá en sus carnes? ¿Has experimentado alguna vez aquella grata sensación de quedarte tirado en el sofá sin tener aquellos ojos abstractos clavados en la nuca y que parecen decirte "el tiempo perdido no es oro, es mierda"?


Lo has sentido?

Yo sí.

Se desarrolló una tregua fugaz en mi espíritu.... el problema es que yo creí que lo que había ganado era un tratado de paz permanente.

Pero no. No fue así.

Y por ello, cayó ante mi esta rutina de siempre de un modo tan doloroso. Y ahora me pregunto "¿y ahora qué?". Me han fastidiado bien. En mis ratos muertos, (como en este preciso instante), siento de nuevo aquella angustia. Porque no es otra cosa. Es sólo angustia. La angustia de saber que esta coyuntura no es adecuada ni para mí, ni para mi alrededor.

Me he metido de pleno en una situación que reconozco como reconocería a una vieja enemiga cuando piso mi pueblo después de mucho tiempo.

Ahora que sé que detrás de esta paredes hay libertad, todo es más irónico y punzante.

No comments: