Esquela 231: Camino de la tristeza

Sé lo que muchos piensan. Que más que el cielo caer sobre mí haciendo añicos todos mis huesos, soy yo el que me empecino en chocar incontables veces contra un suelo que no puede ser más bajo.

Hay otros que no piensan eso. Hay, porsupuesto, los que no piensan en mí. Participaron todos de un trecho conmigo; sus destinos y el mío se tornaron uno solo al cioncidir. Las ruedas siguen ardiendo, el caucho se huele aquí y en muchos otros lugares. Me despojo de lo enclaustrado en el tiempo. retengo algunos detalles de cada cosa. No puedo elegir qué recuerdo.
Y al final, las ruedas siguen girando, quemando caucho. Cada persona construye su vida. Quién lo diría. No me pregunto en qué creen que me he convertido. Ya lo sé. Me pregunto si es normal esto de guardar figuritas del modo que yo lo hago. Cada pieza de porcelana pertenece a un recuerdo que a veces nisiquiera se corresponde con la cara de alguien. A veces retengo mejor la sensación de un espacio, que la esencia de la persona con la que lo compartí. Debería preocuparme la poca estima que tengo por algunos seres humanos? No lo creo. No les deseo nada malo. Solo quiero que no me molesten. Yo no pienso molestarles tampoco.

Veo que la gente avanza hacia algún lugar. Avanza hacia sus objetivos. Lo respeto, pero no puedo soportar que crean que sus objetivos son comunes para el resto de personas.

veo cómo giran las ruedas de cada cual. Algunos tuvieron momentos íntimos conmigo que ahora parecen no recordar. El roce, el tacto, el contacto pasajero de dos manos... cada uno le da la importancia que quiere; yo ando buscando un denominador común. Una raíz. Algo sagrado que no se pueda obviar. Un entrelace, por nimio que sea, de dos entes que se perciben autónomos durante su propia existencia.

Es entonces, al imbuirme en esta cruzada, que llego al lugar de la tristeza.

Un día antes del clásico

El estado mental, el estado económico de un país.... todo eso tiene más de lo normal que ver. Que verse. Las dinámicas que encuentro alrededor tampoco, ninguna de ellas, parece desplazarme hacia algún lugar poblado de contenidos sanos y equilibrados.

Todos los remolinos llevan a, si no el mismo, sus respectivos pozos de mierda. Sí, hay distintos tipos de mierda. Alguna sienta mejor que otra. Hay que ver lo que hay que aguantar. Nunca se debe basar la confianza en los golpes de suerte. nunca se ha de esperar a que las cosas cambien solas. Eso ya lo sé. Sé contra qué lucho. Pero he visto demasiadas películas americanas.

Esquela 293: Dentellada

Esta es una historia que pasa en un segundo. Empieza en mi estómago, que se retuerce por sorpresa. Se pone del revés. Las costillas de repente se desploman sobre mi corazón. Mis hombros se encogen sin yo quererlo en absoluto. Mi cuello pesa, a mi corazón le cuesta mundos latir con la frecuencia mínima. Siento los latidos de fuera para adentro;

Te veo de la manera menos intensa; sé de ti del modo más difuso, y de repente me siento más triste que nunca. Imagínate...

Qué será de tu vida actualmente; tú, que fuiste el relámpago más fugaz y fulminante a la vez. Qué será de tu cabello, tan capaz de portar con tanta sencillez todas mis ensoñaciones, qué será de tus labios que juraría que llegué a tocar; pero no puedo estar seguro, porque eso significaría tener fe en lo sobrehumano, lo sobrenatural que eras. Qué será de tu cuerpo, toda tu piel tan pálida, tu caja de cigarrillos eterna, tu incontables apareceres y despareceres en la irrupción mísera tuya en mi línea...

Te veo; no dices, no digo; maldigo. Esto es lo que se suele decir. Toda la historia recorre mi cuerpo; alargada ella, tanto como corta la parte de mi vida envuelta de tu olor. Me va de una punta a la otra de mi sentir; se acomoda, se sitúa óptima para empezar a estrangularme.

Eso es lo que ha sucedido; y me voy hasta el más lejano de los polos: la muerte. pienso en la muerte que me va a llevar cualquier instante; Qué habré sido para ti? tan poco para ti... qué insolidario es también el mundo de la emoción; qué mal repartido está. Cómo malvive mi alma por culpa de tu opulencia y tu grandiosidad. Eres la única que debía estar en mi vida, como aquellas canciones que una vez compuestas, se dice que siempre habían estado en aquél lugar, solo que alguien se debía encargar de escribirlas para no alterar la realidad.

Ves, anda, ves y sigue tu parábola mágica.

Esquela 292: Será que no me muevo

Hay veces que no se sabe si una cosa empieza o acaba. Hoy es una de esas veces.
Ni siquiera sé qué empieza y qué acaba. Es uno de esos momentos.
Podría ser el mayor aguafiestas del mundo o el tío mas enrollado que existe. Tampoco lo sé. Hoy solo lleva una firma de sosiego, tranquilidad y de aceptación de los hechos.

Qué hechos? tampoco lo sé. Es como so estuviera-ojalá-tirado en una playa desierta observando los sucesos naturales de siempre; el sol se mueve de un lado para otro. Me invade una paz que no está lejos de aterrarme y tampoco se sitúa a mucha distancia de lo hogareño y por tanto agradable.
¿me he cansado de algo? ¿o esque estoy mejor en plenas facultades para empezar algo nuevo?.
Tampoco lo sé. Pero algo está cambiando. Lo supe ayer mientras mi hígado se hartaba de administrar el alcohol. No fue la mejor de las borracheras, verdad?

Dos masas tectónicas y yo enmedio justo ahora.

Esquela 291: Me paso el testigo

Corriendo entre macizos que no son macizos de roca ni nada de eso. Solo son montones de algo. De qué? porqué tienes que saber de qué? solo son montones. Ahí voy dibujando una parábola que calculé la última vez que fui enormemente feliz. He de chocar contra el final del cielo y la tierra. justo en donde el sol se despereza. Voy directo; he apuntado. Y durante el camino, veo las tierras que he pisado siendo un trozo de gente más. Veo los edificios que se levantaron enfrente de mi lugar favorito y sagrado.

La cosa que más me cuesta explicar es la que me hace sentir más feliz. Por eso, aquél lugar sigue siendo el mejor del mundo; por eso me permito aconsejarme. Si me encuentro jodido puedo ir a un lugar en donde por muchas barreras de cemento que levanten alrededor seguiré paladeando el placer de existir. La mezcla de los recuerdos con el presente sin el futuro en frente.

Los políticos se pasan la vida hablando de problemas; pero a la vez dicen que este mundo es precioso y que no hace falta cambiar los fundamentos. Curiosos hijos de puta, los políticos. Me la sudan todos; Si me encuentro mal voy a ir a un lugar que no se puede soñar de tan sencillo que es. si me noto triste me remojaré en cloro. Si decaigo, si decaigo, solo he de dar una vuelta por los huertos adyacentes y visitar las construcciones que armanlos payeses y de las cuales desconozco el nombre. Puedo jugar a tenis, o ver cómo juegan, puedo pasear por la playa, con o sin bambas, puedo entrar en cualquier bar, puedo pasarme el testigo. Eso es, puedo pasarme el testigo.

Esquela 290: un paso más

Vuelve a estar ahí al fin la sensación que te martiriza cuando eres más joven. Conforme pasan los segundos, venzo la barrera del tiempo con mayor facilidad. Ya me encuentro casi en el mismo momento en que running to stand still era para mí, más que una canción, una especie de hechizo pronunciado de manera rítmica. Ahí me encuentro otra vez, con mi antiguo yo como único confidente.

Es curioso, me encuentro ante mi misma persona hace un puñado de años. Yo, el yo actual, me encojo, me sirvo a mi yo antiguo en posición fetal. Quizá mi único error o acierto con respecto al resto de seres humanos es que me he sabido mucho menos entero con el paso de los años. Si me complacieran un deseo ahora que me veo frente a mi antiguo Yo, lo único que pediría es saber hacer la más vehemente entregada reverencia.

Mírame, acierto a decir... Quiero disculparme. han pasado unos años y no he logrado nada de todo lo que imaginé cuando hacía menos que había salido del vientre de mi madre. Bombero, astronauta, pintor, futbolista, mercenario, espía... jefe de mi propia empresa... nadie.

A medida que pasan los años los sueños van danzando más raso. Nosotros creemos que ascendemos y llega un punto en que los podemos alcanzar; ellos son más asequibles y nosotros más fuertes.

Pero para la mayoría de nosotros la verdad absoluta es otra: Los sueños caen porque ya no tenemos fuerza ara gritarlos bien altos. Pero es que nosotros también caemos, solo que poco a poco. Diría, más bien que nos hundimos. Los sueños nos alcanzan y al final compartimos nuestro aire con ellos. Pero la mayoría no hemos mejorado desde el primer momento que nacimos. Solo hemos empeorado. los sueños han venido a buscarnos para no mortificarnos desde lo más alto. Si se hubieran quedado colgados del cielo, solo se habrían convertido en pesadillas, el caldo de cultivo de las cuales hubiera sido nuestra impotencia y dolor.

No hay que sentirse mal. La vida siempre sigue ahí. No todo es reventar la meta. Un puñado de otras cosas nos acompañan. Si no lo entendemos, podemos ir a irlanda para que sus peñascos nos lo expliquen. Si no tenemos dinero o tiempo para hacer algo así, siempre podemos escuchar 3 canciones, justo de la 5 a la 7 de Joshua Tree.


Dinero. Vaya palabra. Ahora caigo: Dinero es Diré No. Diré no al dinero?
Osado cuanto menos.

Esquela 288: Trizas

Como en la más americana de las tardes de otoño, el sol cae y la sensación de familiaridad parece perfecta. Parece como si tuviera el don de manejar las masas de las pizzas en el aire de manera virtuosa y completamente natural. Los otoños tienen estas cosas; Todo cae. No solo las hojas, el cabello y la muerte sobre los ancianos. También el mundo que hay encima nuestro se acerca más a nuestra piel. Ejerce una presión habitual solo durante estos meses. Si alzas un poco el brazo, puedes rozar algo que se te revela como una intuición vacía.

No es necesario ir tan lejos. A veces tansolo observando los gestos, las paredes o las sonrisas mortecinas puedes extraer algo que va más allá de los habituales significados. Aunque eso sí, no esperes más. No esperes experimentar algo claro y definido. No esperes llevarte nada nuevo del otoño. Solo pasa que te merodea más de cerca aquello que no entiendes. Notas su presencia, como se nota la presencia de un extraño en una casa a oscuras. No sabes nada de él. pero lo notas. El otoño es ese extraño, pero a diferencia de la gran mayoría de los extraños que entran en las casas, apuesto a que otoño no tiene malas intenciones. La muerte, en realidad, si es solo muerte, tampoco las tiene. Solo viene para cumplir el protocolo. Nada puede estar mal si nos sucede a todos.

Desués llega el momento en que te vuelves meramente humano.

- - - -

Todo lo reunido este domingo es demasiado. Ahora ya no puedo explicarlo. Fogonazos desconcertantes iluminan algunas paredes que ahora se vuelven a advinar en yeso. Dentera. Quizá me muerdo las uñas para no poderlas clavar nunca en la argamasa seca.

Esquela 287: Lo horrendo

N sé si lo dije ya Es la combinaci´fecta, por ese motivo qvivir conella. Todo el mndo sueña cola s cossd empre.
No os procpéis pri. quem pasa es que estoy tirando enders co el maya. Es por ell que escrbo así. Es desesprante.

Mañana de pesca con un onton d locos. No sé si voy aetar yo a l altura de la caña. De lo que s´í estoy seguro s d e v a se e la mierda de vida que luualmente. Entramos en noviembre y morimos con much ´safacilidd. Los abuelos aguantan muchomenos.

Vale, po las noches inntorezar. Eso etá muy al. pero eque las cosas mi alreddor están peor todav´.Solo quiero remontar. Nuca me había visto tan echado a erder, y ya es decir. O las cosas empiezen a ir bien. ojalá empeice a remosntar el vuelo. Sentirme seuro y co gana de reventar el mundo-

o dejo ya que me pong alo