Friday, June 08, 2018

Las rallas del delirio



Me lleno de pensamientos hasta derramarme, me lleno de mierda entero.

Entre toda esa miera, busco alguna traza de inspiración, pero créeme que cada día cuesta más encontrarla. La delicadeza se empieza a desvanecer, o quizás es que mis pulmones se han endurecido como piedras.

Escarbo en busca del espacio para el verdadero goce. Pero cuando creo encontrar un solar vacío, un agujero de tiempo, ya tengo otra tarea, otro compromiso delimitando mi presunta libertad.
Sé que no estoy diciendo nada nuevo, solo relato la caída libre que todos y cada uno de nosotros experimentamos desde el preciso instante en que empezamos a existir.
El domingo bendito, si es que existe, se sangra mientras se busca.
Antes pensaba en la belleza que no se preocupa por gustar, y he encontrado un matiz para esta misma definición que ahora ya no retengo en la cabeza.

Me he propuesto millones de veces escribir algo que no tenga que ver con esta tristeza. Pero nunca siento la necesidad, si no es para compartir conmigo mismo mi carrera hacia la nada.

Me detengo (sólo cuando puedo)  y me paro a pensar en lo mejor de todo lo que he conocido.
Sea lo que sea, un paisaje, o una sensación, incluso aquella persona. Todo eso, ya no me pertenece. Solo retengo algún vago recuerdo, parte de la esencia de lo que fue. Pero eso nunca es suficiente. Nunca es suficiente lo mejor. Siempre aspiras a encontrar algo que te de más de esta vida, precisamente porque nadie te dice cómo hay que vivirla.
Cuando abres las alas, sólo eres tú contra un paisaje de vértigo. Tú decides dónde quieres llegar. Y después tratas de alcanzar el punto que sea.  Pero que hay con todo lo vivido? Porque todo lo vivido tiene que convertirse únicamente en recuerdo?

A veces cuesta confiar en uno mismo, solo porque olvidas todo lo que has llegado a ser. Me refiero a lo que llegado a vivir.

La existencia , desde luego, ya no fluye con la misma intensidad

No comments: